¿CÓMO LE PONGO VALOR A MI TRABAJO?
Tomaste la decisión de emprender, soltar la quincena e ir por tu cuenta pero, ¿llega tu primer cliente vía correo y se te dificulta decirle cuánto cobras y cuánto vale el proyecto?, este artículo te va a funcionar muchísimo si estás acostumbrado(a) a bajar tus precios y a recibir a las personas que regatean lo que haces.
Sé que puede parecer absurdo y sencillo, pero cuando emprendes es uno de los obstáculos más grandes a los que te enfrentas y suele ser bastante difícil si vas arrancando.
Aquí quiero dejarte 6 tips para ponerle valor a lo que haces:
1. Investiga a tu mercado:
Y me refiero a tu competencia, cómo anda, en cuánto y qué ofrece. Entre más similar sea al tuyo, al nivel de tu experiencia, conociendo lo que el cliente o posible cliente está acostumbrado a pagar por ese tipo de proyectos, te será más sencillo tomar una decisión.
2. Aprende a decir no:
“El que mucho abarca poco aprieta”, si lo que te está pidiendo va contigo y tienes la capacidad de absorberlo, ¡tómalo! Pero si es solo porque es mejor eso a nada, o aceptas aunque te venden una mega idea que te hará perder y no te beneficia, ¡piensa dos veces antes de aceptar! Ya que esos son unos de los primeros mecanismos que hace el emprendedor novato por temor a no cobrar y no ganar. Lo único que demuestras es que aún no te sientes merecedor de comenzar a cobrar lo que vale tu servicio o producto.
3. Trabaja en tu necesidad:
En este punto me refiero a que no te limites a copiar lo que otros hacen. Realiza un análisis sencillo sobre cuánto necesitas ganar tú anualmente para vivir de una manera cómoda. Considera enfermedades o seguros, vacaciones y tiempos libres. Esto puede darte una idea cuánto necesitas ganar por mes y así dividirlo para sacar tu día.
4. Define diferentes precios:
Esta es una sugerencia que a mí me ha funcionado hasta el momento. Recuerda que puedes cobrar por día, por hora o por proyecto. No todos los clientes están sensibles a tu hora de trabajo, así que algunos les funcionará que les cobres más por proyecto que por horas divididas.
5. Aumenta tu tarifa:
Después de un tiempo, al tener más credibilidad, tener más clientes, incrementar tu cartera y ser un valor agregado, modifica tus precios. Tu precio original se basa en tus habilidades y en tu experiencia, si comienzas a fortalecer esta parte, comenzarás a demandar una tarifa más elevada.
6. Comunicación transparente:
Con cada cliente, contigo, con tus colegas o alianzas que realices, es obligatorio tener una comunicación clara y transparente. Lo peor que puede suceder es tener expectativas poco realistas de tu propio valor en el precio que ofreces. Si cobras poco, o determinas mucho tiempo para un proyecto, vas a terminar trabajando de más, así que esto es clave.
Si hoy en día estás cobrando por tiempo mi sugerencia es que dejes de hacerlo. Al ir practicando y tener más experiencia, notarás que lo haces en menor tiempo y con mejor calidad. Nadie debe pagarte menos porque eres mejor y más rápido que tu competencia.
El valor que te des a ti mismo por tu tiempo, tu servicio, producto, información, conocimiento, herramientas; será clave para fortalecer el camino de tu emprendimiento. No temas decir si o no a determinadas actividades o negociaciones.
Recuerda que estamos para ti, siente la libertad de escribir a [email protected] cualquier inquietud que tengas. ¡Nos vemos muy pronto!